Diplomacia

Ministro Wadephul ve necesidad de innovación tras visita a China

9.12.2025, 16:28

El ministro de Asuntos Exteriores de Alemania, Johann Wadephul, advirtió hoy en China de que Alemania y Europa están quedando rezagadas en materia de avances tecnológicos.

"En lo que respecta a las tecnologías del futuro, China es pionera y, hay que decirlo claramente, también nuestro mayor competidor", afirmó Wadephul tras una visita a la metrópoli industrial de Guangzhou.

El ministro destacó que Alemania no siempre consigue desarrollar soluciones prácticas a partir de la investigación de vanguardia. Y que la sociedad también debe estar más abierta a las innovaciones. "Aquí también tenemos mucho que recuperar", afirmó.

Guangzhou fue la última parada del viaje de Wadephul por China, que ya le había llevado a Pekín para mantener conversaciones políticas. Allí, Wadephul visitó la importante planta de producción de Herrenknecht, líder mundial alemán en la fabricación de tuneladoras.

Los productos "made in Germany" despiertan un gran interés en China, comentó Wadepuhl. La empresa especializada basada en Schwanau, en la región alemana de Baden-Wurtemberg, está considerada como un "campeón oculto" en su rubro y cuenta con casi 5500 empleados. En Europa, Herrenknecht se ha hecho un nombre con grandes proyectos como el túnel de base del Brennero y el proyecto ferroviario Stuttgart 21.

En Guangzhou, la empresa monta y renueva sus máquinas. Herrenknecht ha construido en China la tuneladora más grande del mundo, con un diámetro de 17,6 metros, y ha participado de forma decisiva en la construcción del metro de Guangzhou.

Paseo en transporte sin conductor

De la ingeniería alemana pasó Wadephul al software chino de última generación. En la startup WeRide, fundada en Guangzhou en 2017, el ministro y su delegación dieron un paseo en un minibús sin conductor.

China está a la vanguardia mundial en tecnologías del futuro, destacó el ministro germano. "Si no queremos quedarnos atrás, tenemos que mejorar mucho en Alemania y Europa". En WeRide, dijo, se puede ver "la rapidez con la que se puede implementar la innovación técnica en la vida cotidiana".

La gama de WeRide incluye taxis robotizados y autobuses autónomos, pero también barredoras y vehículos de reparto. La empresa cotizada en bolsa tiene licencias en China y otros siete países.

China está invirtiendo mucho dinero en alta tecnología, como los coches autónomos, en parte porque Pekín espera que esto mantenga el crecimiento económico del país en alza. En algunas grandes ciudades de China ya circulan taxis autónomos en zonas designadas.

Además, se está prestando especial atención a los denominados sistemas de asistencia a la conducción. Estos se clasifican en cinco niveles, desde el control de crucero (nivel uno) hasta la conducción totalmente autónoma (nivel cinco). En China, las marcas están avanzando actualmente hacia el nivel tres. La persona al volante podría dejar que el coche condujera temporalmente y en determinadas situaciones, y podría, por ejemplo, leer el periódico.

Wadephul apuesta a cooperación constructiva

Wadephul expresó su confianza en el desarrollo de oportunidades para una cooperación constructiva con China, tras las graves diferencias de los últimos años.

"En general, durante mi viaje he tenido la impresión de que China, al igual que nosotros, está muy interesada en un intercambio serio y concreto", declaró Wadephul. Y añadió: "Por lo tanto, vamos a continuar con él".

A la pregunta de qué mensaje le transmitiría al canciller Friedrich Merz antes de su viaje previsto para inicios del próximo año, Wadephul respondió: "Creo que el canciller sabe lo importantes que son las relaciones políticas y económicas con China".

Por eso, agregó, es acertado que el canciller quiera viajar a China "y, al igual que sus predecesores, quiera establecer un enfoque en la política exterior y también en la política económica exterior".

Wadephul afirmó que, tal y como hizo en su viaje al país asiático el vicecanciller y ministro de Finanzas, Lars Klingbeil, él también ha podido preparar bien la visita del canciller.

Asimismo, destacó que existen importantes puntos de conexión en los que el Gobierno alemán puede diseñar políticas conjuntamente con China y en los que también se pueden sentar nuevas bases para las relaciones económicas. "Hay mucho por hacer", añadió Wadephul.