Un robot cortacésped "se rebela" y destruye campo de fútbol alemán

El robot cortacésped "Robby" dejó intransitable el campo del club de fútbol amateur Spielgemeinschaft Egels-Popens 1966, en Aurich, en el noroeste de Alemania, al atascarse durante la noche y transformar el césped en barro con surcos que llegan hasta el área de penal.

"Tenemos que renovar varios cientos de metros cuadrados", informó hoy Martin Monnerjahn, presidente del club.

"El daño ya está hecho, no podemos jugar. Todavía teníamos partidos y en las últimas semanas hizo mucho calor, así que el césped seguía creciendo", comentó Monnerjahn, quien añadió que jugar en el campo ahora es imposible.

Sin embargo, los lugareños se tomaron el percance del robot con humor, y las imágenes del césped dañado se difundieron rápidamente en redes sociales. "Era simplemente una imagen increíblemente curiosa, con todo el barro y el agua”, señaló Monnerjahn a la agencia de noticias alemana dpa.

Mientras tanto, periódicos y emisoras de radio de toda Alemania están contactando al pequeño club para conocer la historia de "Robby". "Realmente nunca imaginamos que esto llamaría tanta atención", destacó el presidente del club.

A pesar del daño que le corresponde a la ciudad de Aurich, propietaria del campo de fútbol, en el ayuntamiento también se tomaron con humor la odisea del robot cortacésped.

Un portavoz del municipio comentó que 'Robby' ha demostrado ser "un empleado especialmente comprometido con Aurich", cuidando el campo de manera fiable durante siete años. Pero ahora, añadió, "se saltó una actualización y activó un modo de cultivo", sin supervisión alguna.

Según el portavoz, el ayuntamiento tendrá que evaluar cómo se puede restaurar a corto plazo el campo de fútbol municipal mediante rodillos o resiembra. Dependiendo del clima, informó, se espera que "las obras puedan completarse hasta la primavera de 2026”.

Por su parte, el club Spielgemeinschaft Egels-Popens 1966 lanzó una campaña de donaciones, vendiendo en línea camisetas solidarias con el robot cortacésped "Robby" y el campo destruido, con el lema: "La tecnología se puede comprar, la pasión no".

Las donaciones se destinarán a un campo alternativo arrendado por el club, que también necesita ser renovado. Según Monnerjahn, el drenaje está deteriorado y la iluminación es insuficiente, por lo que el club no puede usarlo de inmediato para los partidos.